En una encuesta realizada por la Universidad de Guayaquil, el 55,1 por ciento de los encuestados no estaba familiarizado con el término turismo religioso, mientras que el 44,9 dijo que sí.

El 78,5 por ciento de los encuestados estaba muy de acuerdo con que este tipo de turismo traería un gran desarrollo económico, mientras que el 21,5 pensaba que esta actividad no era de gran importancia.

Guayaquil tiene eventos religiosos que atraen a miles de visitantes cada año, uno de ellos es la procesión del Viernes Santo.

La procesión del Cristo del Consuelo es un evento religioso donde más de 500 mil feligreses se reúnen para reflexionar sobre la pasión, muerte y resurrección de Jesús. Esta procesión se inició en 1960.

La fundación de la Ciudadela de Nuestra Señora del Consuelo fue promovida por sacerdotes de la Congregación de los Misioneros del Inmaculado Corazón de María, conocidos como claretianos.

Uno de los vecinos del lugar, Luis Alvarado, viajó a Europa en 1959 y observó una imagen de Cristo Consolador mientras visitaba el Santuario del Inmaculado Corazón de María de Madrid. Quedó tan intrigado que hizo impresiones de la imagen para llevarlas a Guayaquil, pero murió tiempo después en Portugal.

Entre sus pertenencias se encontraron estampas que fueron entregadas al padre Canels, quien las dedicó a la advocación de Cristo Consolador. Mandó hacer una copia del cuadro.

El 15 de abril de 1960, el cuadro llegó a Guayaquil, una semana antes de la primera procesión en su honor. Con el paso de los años, varios católicos dieron testimonio de que el cuadro obraba milagros, y empezó a hacerse cada vez más popular.

La Venerable Cofradía del Santo Cristo del Consuelo tiene la figura del Cristo muerto sujeta con tres puntas a una cruz de 1,80 m de altura. Una cruz con el Cristo muerto se encuentra actualmente en Guayaquil. En 2016 se hizo una nueva estatua, que alcanza una altura de 15 m y pesa 17 toneladas.

Los feligreses recorren la distancia de unas 26 cuadras en siete horas.