Continuidades y críticas

Luis Verdesoto Custode, exsecretario Anticorrupción, señaló que estas ocho líneas estratégicas son en gran medida las mismas que formaban parte de la Estrategia Nacional Anticorrupción del 2022. Verdesoto destacó la ausencia de la línea relativa a la "prevención y lucha contra la corrupción transnacional", que considera fundamental dada la influencia del crimen transnacional en la corrupción local. También subrayó la importancia de no destruir las metodologías y diagnósticos previos que han sido efectivos.

Germán Rodas Chaves, coordinador de la Comisión Nacional Anticorrupción, criticó la nueva política como una hoja de ruta que asume que la corrupción se resolverá por decreto. Según Rodas, la verdadera lucha contra la corrupción requiere identificar y desmantelar los núcleos corruptos instalados en los gobiernos de los últimos quince años, especialmente en los mandos medios de la contratación pública.

Propuestas y desafíos

Leopoldo Ocampo Andrade, presidente de la Cámara de la Industria de la Construcción, abogó por una nueva ley de contratación pública que evite parches y resoluciones temporales. Ocampo destacó que la legislación actual permite el direccionamiento y la corrupción, y propuso cambios profundos para garantizar la legalidad y transparencia en el sector de la construcción.

A pesar de las críticas, la implementación de la Política Nacional de Integridad Pública 2030 busca establecer metas claras para el 2030, como incrementar el porcentaje de funcionarios concientizados en prevención y lucha contra la corrupción, y mejorar la transparencia en la contratación pública.